Mi
ausencia durante estas semanas en mi blog me auto-exige a que el regreso tiene
que ser impactante, por eso, después de meditar en un listado de temas muy
variado que he recopilado de experiencias, decidí comenzar por este tema. El
baño moderno.
Mi
vida en estos últimos meses lejos de ser normal, se ha convertido en una lista
de pendientes que en lugar de terminar, se extiende a cada segundo. La mudanza,
la boda, las vacaciones, la luna de miel, los compromisos sociales, en fin, son
muchas cosas al mismo tiempo. Por eso, en el mes de agosto, con mi futuro
marido (sigo haciendo el ejercicio de nombrarlo así para que se me pegue la
frase) decidimos tomarnos una semana de vacaciones, y antes de ello, nos fuimos
un fin de semana a Acapulco.
En
ambas ocasiones, fue la playa la protagonista de nuestros descansos. Y
honestamente: Me encanta estar de vacaciones!!! Nada puede ser mejor, soy de
esas personas que en las vacaciones me convierto en el ser mas feliz y mas
alivianado del planeta. Felicidad en mi diccionario se escribe con V de
Vacaciones.
Pero
bueno, vamos al tema que nos compete. En Acapulco fuimos a la casa de unos
amigos. El complejo estaba poca madre, y la casa, nuevita, hermosa, con todo
perfecto. Lo raro era que en la habitación de visitas, donde nosotros nos
quedamos, era un monoambiente, donde estaba la cama, la tele, la regadera, el
lavabo y el inodoro (lo que aquí en México se llama escusado). No había
paredes…me siguen? Entonces te obliga a perder todo tipo de pena, o a caminar
hasta el baño de visitas para hacer pipi…ni hablar de lo otro, no? Mi problema
es que mi cuerpo funciona como In-and-Out, tomo agua y al segundo tengo que
hacer pipi. En la noche, mis levantadas son 2 al menos, por lo que la
experiencia del baño moderno fue un acontecimiento gracioso en el fin de
semana.
Lo
loco de todo esto, es que luego nos fuimos de vacaciones a Playa del Carmen, a
un departamento hermoso y gigante. La recámara principal estaba preciosa, pero
a que no saben que? También tenía baño moderno!!! Que le costaba al arquitecto
hacer una puerta ahí? Espacio sobraba!!! Lo gracioso de esta experiencia es que
el baño más próximo era en la otra recámara de ese piso (porque era un depto. de
2 plantas) y el pasillo era super largo. En la noche, era un verdadero éxodo
hacer esa caminata.
Mi
conclusión es que el mundo se está modernizando más rápido que mi mente, y me
preocupa. Siempre me consideré una persona open-minded, pero eso de sentarme en
el escusado mirando a la cama, está lejos de ser una experiencia que quiero
transitar. Pónganse en mi lugar por un segundo….cada noche, maldije a los
arquitectos que hacían de cada necesidad fisiológica un análisis de decisión
antes de pararme de la cama.
Lo
bueno es que aprendí algo más: Ahora, cuando reserve departamentos, más allá de
preguntar el tamaño de la cama, y como es la regadera (2 factores fundamentales
en mi vida y en la felicidad de mi novio) voy a preguntar si el baño es moderno
o clásico. Ojalá que esto llegue a varios arquitectos y revisen sus planos
antes de su próxima construcción
Arrivederci!
Es que detrás de cada arquitecto, debería haber una gran mujer! El toque femenino era fundamental para esos baños! ¿En serio en qué pensaban al construirlo? lol
ResponderEliminarNos debes más detalles de tus preparativos para la boda!